ELIA Y EL DRAGÓN TON-TON

En breve saldrá publicado mi nuevo libro. Esta vez es infantil y se titula Elia y el dragón Ton-Ton.

¿Qué cuenta esta historia?

A lo largo del tiempo se nos ha hecho creer que los más valientes siempre ha sido los hombres. Los únicos capaces de salvarnos de todos los males eran ellos, aunque, a su vez, eran los causantes. Bueno, dicen que «el que hace la ley, hace la trampa». La cosa es que a lo largo de la historia ha habido muchas mujeres que han guerreado, que cogieron la espada, la cota de malla y la armadura y salieron al campo de batalla: Artemisa I de Caria, Juana de Arco, Trieu Thi Trinh, Nakano Takeko…

Hace dos años nació mi hija Elia, que lleva ese nombre porque su madrina es una de las personas más luchadoras, valientes y transgresoras (sin gritos ni aspavientos) que conozco. Quería escribir algo para ella, que ella fuera protagonista de uno de los objetos que más le fascinan a sus dos años, un libro.

Mi hija, como muchas otras hijas, no tiene prejuicios, le da igual que la confundan con un niño por NO LLEVAR PENDIENTES. Elia es feliz porque nadie la estigmatiza (aún) con nada. Le encanta jugar con espadas y con coches y con su cocinita y leer. Se compadece de cualquiera que tenga una «pupa», adora a sus perros y no ve el peligro. Es cierto, no lleva pendientes, ni falta que le hace, a la guardería va en pantalones y los fines de semana usa vestidos o no dependiendo de cuál sea el plan.

Para Elia. Porque ser niña es lo mejor del mund
No dejes que nadie te convenza de lo contrario, hija
Para Elia Barceló por ser sueño e ilusión
Para doña Elia porque siempre tiene una palabra
bonita y una sonrisa como una casa. Además de una
retranca que me entusiasma

Elia adora a los animales, jamás los atosiga, ni los persigue. Este verano pasado salvamos a un gorrión de las fauces de un depredador feroz, nuestro perro Dudo. Dudo jamás ha matado a un pájaro, pero los caza y te los trae. De Osa mejor no comentamos nada. Dudo y Elia hacen un tándem absolutamente genial. 

Así que tenemos: a las mujeres guerreras, amor por los animales, misterio y aventura (a Elia le encanta jugar a «tener aventuras»).

Por otro lado, una de las personas que más quiero en este mundo es Elia Barceló. Ahora no viene al caso contar por qué. Soy perfectamente capaz de imaginar a mi hija y a su madrina montando en un caballo blanco que habla para ir a salvar a los niños que han desaparecido de Blandibury, el reino donde vive Elia.

De hecho, soy perfectamente capaz de visualizar a Elia Barceló de pequeña jugando a ser caballero.

El dragón Ton-Ton surge porque a todos nos han hablado de monstruos imaginarios. Es más sutil asustar a un/a niño/a con dragones, dinosaurios, seres amorfos, alienígenas o entes que ya no pertenecen al mundo de los vivos que explicarles que el ser humano maltrata,  mata,  roba, o…

El dragón Ton-Ton es un ser bueno al que todos temen por su aspecto. ¿Os suena? Al que todos juzgan por eso mismo. Incluso Elia cree las habladurías en un principio, pero eso no la para a la hora de enfrentarse al dragón. Para Elia todo es posible porque, claro que tiene miedo, pero se enfrenta a él y lo vence.

El señor Oscuro es la encarnación del mal en forma de «esto es lo mejor para ti», del poder establecido y la sociedad jerarquizada. 

Dicen que los padres y las madres somos héroes para nuestros/as hijos/as en la infancia, yo puedo asegurar que Elia para mí es la heroína no de esta historia, sino de cualquiera que pueda imaginar.

La labor de Francisco José Asencio a la hora de crear gráficamente tanto a Elia como al dragón es tan bonita que solo puedo estarle agradecida. No es la primera vez que trabajo con él y no va a ser la última, estoy convencida.

Ahora solo falta que Elia llegue a vuestras casas y os coja de las manos y os haga dar un paso al frente para que sigáis soñando y creyendo que la infancia siempre debe ser un lugar seguro.